...es un libro de Juan Antonio Vallejo-Nágera que me parece vital. Lo he descubierto de casualidad y me ha enfrascado de principio a fin. La temática es dura: sucesos reales, un poco disfrazados, en manicomios. Habla de muerte, sexualidad, amor, episodios absurdos que viven por gente externa al hospital o gente que se pasea por sus pasillos; dice que "el ejercicio de la Psiquiatría brinda la oportunidad de observar "el Teatro del Mundo" entre bastidores con los actores despojándose del disfraz".
Encontrarás cosas desgarradoras como "Es la historia de un hombre, un mango de paraguas y su entrañable relación. Tienen en común que están rotos y abandonados." ya que Vallejo-Nágera pretende mostrar que el ser humano, aun con la mente deteriorada y en las condiciones más adversas, puede dar lecciones de talento, ingenio, generosidad, sublimación y grandeza...
PD: aquí podéis leer la reseña que hice de otro libro suyo.
PD: aquí podéis leer la reseña que hice de otro libro suyo.
Hola, Saray. Compré el libro en todocolección, a un precio simbólico como si fuera, ya descatalogado como está, un “instrumento desafinado”. He leído cosas sobre experiencias de médicos y otros profesionales y este tipo de lecturas siempre me han atraído. Aquí se nota que el doctor también es literato y da a las historias un aire de cuento (con su comienzo, nudo y desenlace). En este circo donde podríamos compararlo con el número de los payasos (lo digo sin ánimo peyorativo, por supuesto) el doctor parece que hace de payaso listo, expone el raciocinio y los otros lo parodian. A veces Juan Antonio me ha parecido un poco cruel, cuando dice de los cuidadores de entonces “ignorantes de pocas luces incapaces de encontrar otro empleo”, cuando a Cristobalia le sugiere que “deje de hacer el ridículo por las calles de Madrid”; se le nota el rictus generacional, esto no es malo, es un gran documento de la situación de aquellos años cincuenta, en algunas cosas me ha recordado al Pascual Duarte, y he pensado si algunas personas, en una situación desesperada y solamente por sobrevivir, no impostaban ciertos roles para ingresar en el manicomio y comer algo en aquella época, no sé. El episodio del mango de paraguas, las canicas; geniales. Las situaciones rampantes y duras sobre entre otras cosas el tema sexual, el agujero en el árbol, y ese hallazgo literario de definir el color de la carne de un póster donde aparece una mujer desnuda como “color rosa cerdito”. También la disertación sobre la locura de Don Quijote (un loco dentro de una línea racional) y la locura absurda e inenarrable que pueda ser un caso demasiado grave. Me ha gustado mucho; el título es un gran acierto que sugiere muchas cosas.
ResponderEliminarMe alegra que te haya gustado y que hayas podido dar con este pedazo de libro. Obras así nunca deberían caer cerca de la palabra 'descatalogado'. Al leerte dan ganas de hacer una relectura (ya encontraré el hueco más adelante). Un placer tener lectores como tú qué reviven las reseñas y les aporta más jugo. Felices fiestas, por cierto ��
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